Durante el año 2017 tuvieron lugar una serie de inundaciones que perjudicaron considerablemente el nivel de producción del agro. Sin embargo, una cantidad de embarques cada vez mayor de productos como el trigo, el girasol, la soja, el maíz, la cebada y el sorgo provocaron una fuerte movilización en las obras del Puerto de Quequén.

Crece el puerto de Quequén y crece el movimiento de cargas

El puerto de Quequén se encuentra ubicado en las cercanías de la ciudad bonaerense de Necochea, sobre el margen de la Costa Atlántica. En el último tiempo se ha visto objeto de un intenso aumento en la movilización de cargas. Fue esto lo que impulsó que se lleven a cabo con mayor velocidad las obras en el interior del mismo. El objetivo fundamental de ello es el de poder dar con las condiciones edilicias necesarias para que se pueda ver un aumento en la capacidad de trabajo y de almacenaje. Estos esfuerzos se dirigen fundamentalmente a que al menos una de las terminales de este puerto puedan aumentar considerablemente su capacidad.

Las obras se destinan mayormente a poder ampliar la playa de recepción de camiones y vehículos para el traslado de las mercaderías. La llegada de estos transportes se ha visto duplicada en el año que corre. Al mismo tiempo, se apunta a ampliar los espacios en los que poder circular con autoelevadores, destinados al manejo, la descarga y el guardado de los productos que ingresan y salen del puerto.

Un elemento que genera este aumento en el flujo de mercados del puerto de Quequén tiene que ver con que está ubicado sobre aguas muy profundas. Esto facilita y favorece la llegada de embarcaciones grandes, que en muchos casos no pueden ingresar a otros tipos de puertos. Al mismo tiempo, cabe destacar que la zona en la que está el puerto es un área de la costa que no está sedimentada.

El crecimiento en la actividad de este puerto está trayendo consigo la necesidad de más trabajadores para llevar a cabo una serie de tareas fundamentales para su correcto y óptimo funcionamiento. Además, se apuesta a contar con la maquinaria de gestión de cargas necesaria, para que el traslado de las mismas pueda llevarse adelante sin problemas, en cortos plazos de tiempo y, especialmente, garantizando la integridad y el bienestar de las mismas. Esto último se relaciona también con que se trata mayormente de cargas de alimentos o materias primas, que deben ser tratadas y trasladadas cuidadosamente.